HISTORIA DEL TENAMPA
El Lic. Ignacio Reynoso, habiendo establecido su residencia en la ciudad de México, promovió la llegada del mariachi de Concho Andrade, que arribó a la capital el 25 de julio de 1925. Al día siguiente, hicieron su presentación en el restaurante “La Bombilla”, lugar histórico porque ahí fue asesinado el general Álvaro Obregón, cuando celebraba el onomástico de su amigo el diputado federal Alfredo Romo.
Cuando Juan Hernández, tuvo noticias de la visita a la capital de su paisano Concho Andrade, quien venía al frente de su mariachi, no tardó mucho en localizarlo para platicar con él y convencerlo de que se fuera a trabajar a su cantina, en la forma como siempre lo han hecho los mariachis en Cocula.
Por lo tanto el primer mariachi que llegó realmente a Garibaldi, fue el de Concho Andrade. Él tiene el mérito de haber sido el primero en tocar en la cantina El Tenampa.
A finales del año 1927, Concho llevó a su compadre Cirilo Marmolejo a tocar también en ese centro. Mientras uno de los grupos tocaba dentro del local, el otro complacía a la clientela en la plaza. De esta forma el mariachi empezó a ser un fenómeno nacional y su punto de identificación sería, en adelante, la Plaza de Garibaldi.
La habilidad musical de Concho Andrade, fue reconocida en todo el país, en una época en que no había muchos medios de comunicación. Con su extraordinaria tenacidad, se convirtió en fundador de un gremio de más de tres mil músicos y en edificador del Garibaldi que todos conocemos ahora. Concho Andrade murió en la pobreza en el año de 1943.
El Salón Tenampa abrió sus puertas en 1925, cuando Juan Indalecio Hernández decidió instalar en la capital un negocio similar al que tuvo en Guadalajara.
Juan Hernández llegó a la Ciudad de México en 1923, para establecerse en la calle de Honduras, a un costado de la Plaza de Garibaldi, llamada así con el propósito de honrar al teniente coronel José Garibaldi.
El origen del nombre, de uno de los salones con más tradición en el DF, proviene del náhuatl y significa “en los muros” o “lugar amurallado”.
El primer mariachi que llegó al salón fue el de Concho Andrade, paisano de Juan Hernández, quien en cuanto se enteró que Andrade se encontraba en la capital lo buscó y convenció para que trabajara junto con su mariachi, en la cantina.
A finales de 1927, Concho Andrade llevó a su compadre Cirilo Marmolejo a cantar al salón.
El Tenampa ha quedado plasmado en el panorama musical y cultural de México, como uno de los lugares más típicos para disfrutar de un buen tequila y la música de mariachi.
Considerado uno de los lugares obligados cuando se visita el Distrito Federal, se ubica en la Plaza de Garibaldi, colonia Centro, delegación Cuauhtémoc.
A lo largo de los años, el Salón Tenampa ha sido escenario para la grabación de distintas películas mexicanas; además, ha contado con la visita de reconocidos cantantes y actores, entre ellos Cornelio Reyna, Mario Moreno “Cantinflas”, Pedro Infante, Tin Tan y Luis Miguel.
Los servicios con los que cuenta actualmente son: restaurante bar, música mexicana con mariachi, música mexicana con grupos veracruzanos y tres salones para eventos.
Jose Alfredo y Chavela Vargas clientes consentidos de la época de oro se dice que ellos dos siempre se acompañaban con una botella de tequila y en este lugar de magia y tradción se inspiraban para componer sus canciones. Jose Alfredo Jimenez compuso la canción “Mi Tenampa” la cual trasmite una experiencia del lugar.
Pedro Infante el gran representante de la música vernácula a en México grabo varias películas en el salón tenampa, la más emblemática es la película” gitana tenías que ser” donde canta ”Mi tenampa” interpretando a un mariachi del salón . Junto con Jorge Negrete como en la película “dos tipos de cuidado” quedaron plasmados como parte de la historia del tenampa en sus muros.
Mario Moreno “Cantinflas” uso como escenario el tenampa para su película “El Potrero”. Junto con “Tin Tan” visitaban nuestras instalaciones y eran clientes frecuentes.
Luis Miguel uno de los grandes artistas contemporáneos fue nuestro cliente y canto alegremente sus éxitos junto con nuestros mariachis.
Oscar de la Renta diseñador de carácter internacional quiso vivir la experiencia de el lugar donde la tradición se vive y con una gran alegría disfruto de la música mexicana y una deliciosa comida.
Regina Orozco en la develación del mural de Chavela Vargas en un evento privado escuchamos su voz inigualable junto con el mariachi.
Laura Leon “La Tesorito” y Steven Baldwin nos honraron con su presencia tras develar un reconocimiento a el cantante vernáculo Santiago Arroyo.
Enrique Bunbury le encanta visitar nuestras instalaciones cuando visita nuestro país es un cliente recurrente.
Gloria Trevi realizo hermosas fotografías para una revista.
Estas son algunas estrellas que iluminaron el salón con su presencia y que algunos de ellos quedaron inmortales en nuestros muros.
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